Canciones Para Rameras
Mujeres apartadas, denigradas, vilipendiadas, estigmatizadas, sin más valor para la sociedad que el fruto rancio oculto (aunque no tanto) entre sus piernas. Fruto al que acude una ingente cantidad de hombres sedientos buscando saciar con su jugo los más bajos deseos carnales, buscando, más que nada, saciar su hombría. Sin embargo, desde los tiempos más remotos, estas flores nocturnas han sido las musas innombrables de una infinidad de poetas, juglares, trovadores, escritores, artistas, científicos, magnates, emperadores y en general, de hombres de todas las épocas, clases sociales e ideologías. Un caso famoso que no necesita explicación es el de María Magdalena, mencionado en La Biblia. Otro caso famoso es el de Teodora de Bizancio, que pasó de prostituta a emperatriz, al casarse con el heredero al trono del Imperio Bizantino.
Siempre me ha fascinado la idea de como estas doncellas de las tinieblas, habitualmente asociadas a la pobreza, a los vicios y enfermedades, han hecho brotar en los más variados hombres los más sublimes sentimientos. Muestra de ello son las canciones que quiero compartir en esta entrada. Cantautores de todas partes del mundo hispanoparlante le cantan a estas mujeres que con un grito silente siguen clamando que se les otorgue todo el honor y privilegios que durante toda la historia de la humanidad se les ha negado.